Redacción
Aunque el Servicio Fitosanitario del Estado (SFE), registró en el 2023 el ingreso de 263 310 kilos de pitahaya al país, procedente de Nicaragua, datos del economista y productor Luis Fernando Fallas, estiman en 1 400 000 kilos por año la importación de la llamada «fruta del dragón» desde la vecina nación del norte.
Aunque La Voz de la Pampa solicitó también estos indicadores al Ministerio de Hacienda, al cierre de edición no había llegado tal información. Según el SFE entre el 2020-2023, se registran el paso de 645 024 kilos por ese puesto fronterizo.
Fallas, agricultor de pitahaya en Belén de Carrillo y promotor de una cruzada para frenar lo que llama «entradas irregulares» de la fruta a Costa Rica, denunció tal problemática durante una reunión sostenida el pasado 14 de febrero con el viceministro de Agricultura. Fernando Vargas. En esa cita participaron delegados del SFE y del despacho del diputado oficialista Daniel Vargas, entre otros.
Para el viceministro Vargas, actualmente se cumplen con los controles reglamentados por el Servicio Fitosanitario del Estado y Aduanas, destacados en Peñas Blancas.
Agregó que, mantienen coordinación con el Ministerio de Seguridad Pública, Policía Fiscal, Policía de Fronteras para frenar cualquier ingreso ilegal de productos agrícolas al país, entre estos la pitahaya.
El productor reconoció no satisfacerle la reunión y a la vez estima que, anualmente, 1 400 000 kilos de pitahaya ingresan por la frontera de Peñas Blancas, con un fuerte impacto negativo en la producción y comercio nacional.
Según Fallas, por ese puesto fronterizo el estado costarricense deja de recaudar en sus arcas fiscales, por causa de esas «entradas irregulares», cerca de 365 mil millones de colones por año. Indicó que «la importación arruina y quiebra al productor nacional, al ponerse en peligro la inversión local y la cadena alimenticia costarricense».
Reiteró que continuarán con las gestiones administrativas ante las instancias respectivas, dirigidas a frenar esas acciones, dado a que sintió falta de voluntad ministerial para solucionar la situación.
El viceministro Vargas, invitó a Fallas a Peñas Blancas a presenciar los controles fronterizos aplicados a los productos agrícolas, entre estos el de la pitahaya.
Además adelantó la activación de la Mesa Técnica de Pitahaya; ofreció abrir un espacio para la comercialización de pitahaya en Pima-Cenada; así como también coordinar una reunión con las cadenas de supermercados establecidas en el país, para que den preferencias a la compra de la pitahaya nacional.
Así como su compromiso de seguir con los controles policiales fronterizos y en carretera.
Por su parte, el diputado oficialista Daniel Vargas, comentó que si bien no participó en la reunión su despacho continuará con el tema y abogará por la protección de la producción nacional de pitahaya.
El cultivo de la pitahaya es prácticamente nuevo en el país y Guanacaste, es una de las zonas con mayor siembra de la “fruta exótica», de grandes beneficios nutricionales para la salud humana al ser una fuente de antioxidantes naturales, relaja el sistema nervioso y es vital en la producción de glóbulos rojos. Entre sus propiedades destaca la vitamina C, B1, B2 y B3, que ayudan a hidratar la piel, a combatir enfermedades cutáneas.
