Me voy con la frente en alto

Luis Gerardo Castañeda Díaz, dos veces alcalde liberiano.

Redacción

Mentón arriba y mirada al frente, así saldrá Luis Gerardo Castañeda Díaz, de su despacho de la Alcaldía de Liberia, el próximo 30 de abril.

«Dejo la casa ordenada, con las finanzas sanas y una agenda con presupuesto llena de proyectos», dijo en un cara a cara con La Voz de la Pampa.

Su inseparable sombrero de lona, ala ancha, a un lado y sobre una mesa de trabajo con carpetas y documentos, acuñaba en su memoria fechas claves de su primer y segundo periodo en ese despacho. No olvida como con dineros del timbre municipal, se pagaron a finales del 2020 los aguinaldos y salarios de los empleados municipales. «Me encontré un desorden financiero», apunta.

Este educador y hombre de radio, ocupó el mayor puesto administrativo de la Municipalidad de Liberia, entre el 2011-2016 y contra viento y marea en el 2020- 2024.

No titubea al asegurar que en ambos periodos trabajó con los peores Concejos Municipales. «Querían (los regidores) auto administrar y ser alcaldes. Me voy con la frente en alto… esperen mi informe de labores», acotó.

Más conocido como «Pipo» Castañeda, este liberiano de porte humilde, carácter «defensivo-explosivo» y arranque rápido, traducido a veces en gritos y amagues de ring, va al grano para llamar las cosas por su nombre.

Infraestructura vial

Castañeda aseguró que, por orden del presidente de la República Rodrigo Chaves, la ampliación de la carretera Liberia-Nicoya, después del puente del barrio Capulín hasta la altura de las instalaciones de una empresa cervecera, deberá quedar lista antes del 25 julio e igualmente, en coordinación con su oficina, las dos rutas alternas cantonales por barrio La Cruz y el Rodeito para descongestionar el tráfico vehicular de entrada y salida a la Ciudad Blanca.

Los trabajos para asfaltar el tramo por barrio La Cruz, inician a mediados de marzo y solo permitirá tránsito de vehículos livianos, citó.

Otro cambio para agilizar el recorrido hacia y desde Liberia a la Península, es la colocación en el barrio Capulín de un puente Bailey, paralelo al actual, que ayudará a descongestionar el flujo vehicular camino hacia el Liceo Laboratorio y centros educativos de enseñanza superior.

Por la barriada del Rodeito, según el alcalde, la calle está hecha hasta el aeropuerto internacional Daniel Oduber, con algunas variaciones en su trazo, que unirá esa comunidad con el puerto internacional aéreo. Allí transitarán vehículos de emergencia y turismo.

Esta vía alterna se unirá a la rotonda del aeropuerto, al variarse explicó la autoridad municipal, la idea original, pues «no hay plata para compra de terrenos que bordeen, por lo que llaman la Zanjita, el área aeroportuaria».

«Esta segunda etapa por la «Zanjita», tendrá que realizarla el Consejo Técnico de Aviación Civil (Cetac). Ni ésta ni las municipalidades que vengan tendrán los recursos para comprar terrenos que permitan ampliar la ruta alterna por ese lugar. Es una millonada lo que valen esas tierras», dijo Castañeda.

Admitió que la Junta Vial, Alcaldía y Conavi, ya trabajan en proyectos que podrían subsanar el caos vehicular que se avecina con el cierre total, el 1 de abril, del puente La Amistad, sobre el río Tempisque.

Otras obras

La ampliación de la actual parada municipal, pavimentación del barrio Santa Lucía hacia Los Terreros, el nuevo Archivo Municipal y Plan Regulador de Liberia, son otras obras que el alcalde saliente Castañeda, deja ya financiados y listo para ejecutarse en esta y la próxima administración municipal.

En oficina con aire acondicionado, en contraste con el calor infernal de la calle, antes del hasta luego atinó a responderme un mensaje final… «persecución política tenían contra mí, a los que vienen… que luchen por Liberia y se quiten las camisas políticas».

Con la frente en alto y mentón arriba, así será la salida del dos veces alcalde liberiano.