Por Natalia Tieso*
La Organización del Bachillerato Internacional (IB) está firmemente comprometida con la educación holística de los alumnos, y por esto, se centra en el desarrollo tanto de valores como de habilidades requeridas en el mundo competitivo y globalizado de hoy. El currículo de los programas del IB prepara a los futuros líderes para adquirir las habilidades necesarias para el ámbito laboral, profesional y personal, a la vez que fomenta capacidades de resolución de problemas y gestión de proyectos.
Principalmente, el IB prepara a las nuevas generaciones para ser ciudadanos del mundo: jóvenes íntegros, que piensan por sí mismos, que sean analíticos y críticos de su entorno, y también, propositivos, dispuestos a colaborar y trabajar en equipo de manera creativa, además que sean capaces de realizar múltiples búsquedas de información. Los educadores del IB guían a los alumnos para que desarrollen sus habilidades innatas. La observación y la curiosidad son el punto de partida del pensamiento crítico.
La Organización es dinámica y receptiva a las necesidades de la sociedad en constante cambio, sobre todo ahora que el mundo se está reconfigurando por la presencia de la COVID-19. Los jóvenes necesitan desarrollar atributos como liderazgo, empatía, resolución creativa y pacífica de conflictos, pensamiento crítico, capacidad de análisis y colaboración, todo lo cual será necesario para su vida presente y futura. Es así como los alumnos de la comunidad de aprendizaje del IB desarrollan un conjunto de habilidades, tanto a nivel social como de pensamiento, comunicación y autogestión. Dichas competencias son transversales y, por tanto, útiles en cualquier ámbito.
El IB tiene como meta formar a alumnos conscientes de su entorno, preocupados por su comunidad y por el tema ambiental, es decir, ciudadanos del planeta, responsables y comprometidos. Por ello, se les prepara para entender el mundo globalizado e hiperconectado, además considerando el contexto de la pandemia, que ha cambiado y seguirá transformando los modelos de enseñanza-aprendizaje.
A través de sus programas, el IB desarrolla una mentalidad internacional, con el fin de poder colaborar en armonía con diferentes idiomas y culturas. Esto es beneficioso en muchos sentidos, pues además del conocimiento que brinda tener contacto con otras culturas y otras formas de pensar, se enriquecen con el multilingüismo, que es un elemento troncal para lograr el respeto y el entendimiento multicultural.
Otras habilidades que promueve la Organización es el pensamiento crítico basado en la indagación, además de una gestión eficaz del tiempo. Este conjunto de habilidades es un beneficio para los graduados del IB, para su vida profesional y personal. En las aulas se fomenta la curiosidad e investigación. La enseñanza se centra no solo en lo que los alumnos saben, sino en lo que pueden hacer. Una clase basada en la indagación se vuelve motivadora. Lo aprendido previamente puede facilitar y abrir las puertas al conocimiento, habilidades y comprensión conceptual.
En la llamada Cuarta Revolución Industrial que vivimos hoy en día, el IB se preocupa también por el futuro de sus graduados, quienes tendrán que vivir y prosperar en una sociedad digital. Por ello, los alumnos aprenden a pensar por sí mismos y de forma crítica, formulan preguntas y plantean inquietudes. Se convierten en jóvenes autónomos, resilientes y con flexibilidad. De esta manera, se plantea un modelo de educación centrado en el desarrollo de cada individuo y se fomentan habilidades interpersonales, es decir, la capacidad de relacionarse con los demás, identificando y gestionando las propias emociones, y también, la toma de decisiones autónomas, por ejemplo.
En resumen, los enfoques de enseñanza y aprendizaje de los programas del IB fomentan la rigurosidad académica y permiten que los alumnos puedan aprender a aprender mediante el desarrollo de habilidades de investigación, pensamiento crítico y creativo, comunicación, colaboración y autogestión.
Acerca del Bachillerato Internacional
La Organización del Bachillerato Internacional, creada en 1968, lideró un movimiento de educación internacional que ofrece ahora cuatro programas educativos exigentes y de alta calidad para alumnos de 3 a 19 años. El IB ofrece a los alumnos ventajas claras al proporcionarles bases sólidas, habilidades de pensamiento crítico y la capacidad de resolver problemas complejos, al tiempo que fomenta la diversidad, la curiosidad y un deseo saludable por el aprendizaje y la excelencia. En un mundo donde hacer las preguntas correctas es tan importante como encontrar las respuestas, el IB promueve el pensamiento crítico, y apuesta por un aprendizaje flexible que trasciende las fronteras disciplinarias, culturales y nacionales. Con el apoyo de educadores y coordinadores de prestigio mundial, el IB actualmente cuenta con más de 1,95 millones de alumnos en más de 5.300 colegios de 158 países. Para obtener más información, visite https://www.ibo.org/es/.
* Mg en Educación, responsable de desarrollo regional para América Latina del Bachillerato Internacional (IB)