El proyecto para la producción y comercialización del cáñamo en Costa Rica, da sus primeros pasos, el INTA iniciará estudios de cultivo en dos regiones, los climas tropical seco de Guanacaste y tropical húmedo de la zona caribeña son los seleccionados para ver la adaptabilidad de la planta a las condiciones en el país
Gustavo Solera
Con el ingreso de las primeras plántulas in vitro de cáñamo industrial, el Instituto Nacional de Innovación y Transferencia de Tecnología Agropecuaria (INTA), desarrolla las primeras pruebas de campo de diferentes cultivares en las regiones Chorotega y Huetar Caribe.
La especie, Cannabis Sativa L. Sativa, registra bajo nivel de THC (tetrahydrocannabinol) y un alto nivel de CBD (Cannabinol), es usada en la producción de semillas y aceites esenciales. Las pruebas del comportamiento en diversas regiones serán vitales en la verificación de comportamiento de la planta.
El Servicio Fitosanitario del Estado (SFE) estableció los requisitos para la importación del cáñamo, mediante el correspondiente Análisis de Riesgo de Plagas (ARP), este permite la importación de semillas y material in vitro de diversos orígenes.
Para su importación, el INTA suscribió un convenio de cooperación técnica con la Fundación para el Fomento y Promoción de la Investigación y Trasferencia de Tecnología Agropecuaria de Costa Rica (Fittacori), ente encargado de la evaluación sobre la adaptabilidad de los cultivares de cáñamo industrial.
Renato Alvarado Rivera, ministro del MAG (Ministerio de Agricultura y Ganadería), menciona que las investigaciones facilitarán el proceso de desarrollo de la actividad productiva, transfiriendo de forma ágil los resultados a los interesados en desarrollar el cultivo una vez que exista la legislación adecuada.
“Al final de esta investigación, el INTA contará con información valiosa sobre la adaptabilidad del cultivo de cáñamo industrial en las regiones donde se realizará el estudio, lo que le permitirá ejecutar nuevos procesos de investigación para la adaptación de la tecnología de producción a las condiciones locales. El INTA es la primera institución nacional de investigación que incursiona en estudios del cultivo, brindándole posicionamiento en el sector agropecuario. Esto acorta los procesos de aprendizaje sobre la actividad, para transferir de manera ágil los resultados a las personas interesadas en desarrollar el cultivo, una vez que el país y los legisladores definan la normativa legal que regirá esta actividad”, indicó Alvarado Rivera.
Las investigaciones permitirán evaluar condiciones agronómicas, agroecológicas y la susceptibilidad a plagas y enfermedades en las regiones Chorotega, la cual presenta un clima seco y la Huetar Caribe con condiciones húmedas. El INTA extenderá los estudios por seis meses aproximadamente.
Este producto tiene diversas aplicaciones, desde fibras textiles hasta biocombustibles; plásticos biodegradables o productos de cuidado personal. También puede servir para consumo humano ya que su semilla es comestible cruda, en forma de harina o en aceite, incluso es utilizada para fabricar leche de cáñamo o aceite.
Comercialización depende de la Asamblea Legislativa
Dado el interés expresado por diversos grupos agroproductivos para desarrollar la actividad de siembra y comercialización, el Gobierno de la República manifestó su decisión de impulsar el cáñamo con fines industriales como una forma de reactivación económica.
Por esto, los diputados de la Comisión Permanente Especial de Ambiente dictaminaron el expediente 21.388 Ley de Producción de Cannabis y Cáñamo para fines medicinales. El proyecto autoriza la comercialización de cannabis con fines medicinales y terapéuticos. En cuanto al cáñamo se permitiría la producción y comercialización para uso industrial y alimentario.
Los congresistas Zoila Volio y José María Villalta, comentaron que la iniciativa busca generar nuevas fuentes de empleo, atracción de inversión extranjera, además de darle apoyo a los pequeños y medianos productores agropecuarios al generar encadenamientos productivos.
No todos los legisladores están de acuerdo con la iniciativa, la diputada Mileidy Alvarado considera que la misma es peligrosa para los menores de edad, resaltó la eliminación del autoconsumo en el proyecto de ley.
La propuesta establece el cobro del 1 % sobre utilidades netas, el impuesto es a la renta obtenida por el cultivo del cáñamo. Se considera que la planta no tiene efectos psicoactivos, por lo que el cultivo será libre, según se plantea en el proyecto.
La iniciativa pasará a ser conocida en el Plenario Legislativo, donde aún se pueden realizar enmiendas a la iniciativa mediante mociones vía artículo 137 y de reiteración.